TRIATLON SERIES MADRID – EL RETO – MI RETO


TRIATLON SERIES MADRID – EL RETO – MI RETO



Bueno hay que empezar a escribir diciendo que este año no voy a poder hacer ningún triatlón distancia IRONMAN, y mas que por motivos deportivos, que los puede haber lo mas importante han sido los económicos que me han echo planificar la temporada de otra manera.
El planing inicial incluía 6 o 7 medio-ironman para la temporada 2011, pero las circunstancias también van cambiando.
A estas alturas, cuando escribo esto, ya llevo 3 media distancia, y debería llevar 4, porque como terminare de contar en esta crónica, el “reto” me dejo sin fuerzas para ir a Buelna.

Empezamos por la explicación, el TRIATLON SERIES by POLAR, organizado por LAETUS, incluía en la Casa de campo de Madrid por primera vez la distancia Doble Olímpica, o Medio Ironman. Y no quise perder la oportunidad de hacer otro media distancia cerquita de casa, con lo que eso supone deportiva y económicamente hablando.
Pero a su vez la organización lanzo el RETO de tratar de conseguir ser finisher del Triatlón Sprint del sábado por la mañana, el Olímpico del sábado por la tarde, y el Media Distancia del Domingo. En principio parece fácil, y a su vez complicado, pero veréis que todo se pude complicar, y a pesar de eso conseguirlo.

Después de mentalizarme para hacerlo, la decisión tarde poco en tomarla, una de las cosas que había que programar era el régimen de comidas, imprescindible sobre todo para la jornada del sábado, donde entre la meta del Sprint y la salida tenía solo 3 horas. En esas tres horas tenía que sacar la bici de boxes, recuperarme un poco, comer, y meter de nuevo el material el boxes. La logística fue casi perfecta, solo fallo lo que complico el fin de semana, la avería en el cambio.

Empieza el RETO.
Me encanto volver a competir en un Sprint después de tantos años, a pesar de que es una distancia que deportivamente me mata, aún así me encontré fenomenal. Me gusto ver tanto nuevo triatleta nervioso, con la ilusión de poder terminar un triatlón. Además de aperitivo había un supersprint donde había mucha gente joven, y tb estuvo genial el triatlón woman, con chicas normales y corrientes con su mtb y los nervios y despistes típicos de alguien que se lanza a un deporte nuevo para ellos/ellas.

SPRINT. Pensando en el fin de semana, salí a nadar bastante tranquilo, quedaban muchas horas, ya habría tiempo a apretar en bici, sali del agua mas despacio de lo esperado, pero no me agobie, luego empezó la bici, la gente iba muy fuerte, pero yo aguante el tipo la primera vuelta, en la segunda vuelta vinieron los problemas, pues la bici en la bajada cuando cambie a plato grande dejo de funcionar el cambio de piñones, con un gran problema me quede enganchado en el piñon grande, la consecuencia fue que en la bajada de la 2ª vuelta me empezó a pasar muchísima gente, eso provoco que en mi 3ª subida de garabitas la hiciera practicamente a plato grande, ya que no podia hacer nada en la bajada y que iba con el piñon grande decidi gastar muchas fuerzas en la subida, pasando gente por supuesto, y una vez que llegue arriba y la velocidad superaba los 30 km/h ya no podia dar pedales. Con lo que me cogieron los que pase en la subida y alguno mas. Me baje a correr pensando que no podia pasarme esto, y me quedaban 40+85 km de bici para el fin de semana. Aún así el ritmo fue bueno por estar mas fresco de lo normal, y mi ritmo fue mas bueno de lo que suele ser en estas distancias. Entre en meta contento pero solo pensando en la bici.

Al terminar la carrera me acerque un stand a ver si me podían echar una mano con el cambio, el chaval me desbloqueo el cambio, y aunque se veía que estaba roto por lo menos al quedar desbloqueado podía cambiar, eso si, necesitaba cuatro dedos de la mano, y hacer piruetas para cambiar, dos dedos sujetaban la maneta larga, y con lo otros dos dedos debía hacer mucha fuerza para bajar piñones.


OLIMPICO. Con la bici medio arreglada me prepare para el olímpico, ducha, comida, y boxes. Me encontré con los del Club de Atletismo de Brihuega, Lolo y su hermando Cesar, que tenían muchas ganas de hacer un Olímpico, por sus tiempo pensé que podríamos terminar cerca pero la cosa no fue así. Lo primero fue que estaba muy apagado en la cámara de llamadas, en lugar del nervio habitual estaba desganado, pensando en que probablemente no podría correr el domingo, y que no se si siquiera podría terminar el olímpico con mi bici “herida”. A lo mejor un red bull me hubiera animado o puesto lo minimamente nervioso para salir con mas ganas de las que salí. Solo un dado, salí del agua en 32 min, y hacía muchos olimpicos que no salia por encima de los 30min. La bici fue una locura, yo no cogía el ritmo bueno, mi grupo cuando lo hubo no era de mas de 5 triatletas, y en las subidas tenia que tocar lo mínimo el cambio. Además en las bajas tenia que bajar piñones rápido para poder agarrar bien el manillar y el freno trasero, cosa que mientras cambiaba no podía hacer. Con un muy mal tiempo en bici me baje a correr, y mas o menos como me paso en el Sprint hice un parcial mas que decente en la carrera a pie, aún que mejore mi tiempo a pie, mi tiempo total fue de mas de 15 min respecto a mi olímpico del año anterior.

Con el mal sabor de la carrera decidí darme un masaje y pensar que es lo que debía de hacer, no sabía donde llevar a arreglar la bici,... y a pesar de que tenia planeado quedarme en Madrid, cogi los bartulos y volvi a Guadalajara para tratar yo mismo de hacer con la bici lo que pudiera en el garage. Entre las 18:00 y las 22:00 pensé mas de 2 y de 3 veces que el domingo no volvería a competir, incluso me levante con la mentalidad de que quizás aunque yo no quisiera no podría ser finisher.

MEDIO IRONMAN. Pero estaba allí una vez mas, la 3ª en el fin de semana, y con las pilas mentales muy cargadas, con ganas de hacer un papel decente en la carrera y rezando por que el cambio aguantara los 85 km que le quedaban. Todo la tensión la solté en el agua, porque a pesar de todo salí en 38 min del agua, o sea un 12% mas rápido que en el Olímpico nadando mas distancia, algo solo explicable con la motivación del sábado y la del domingo a la hora de saltar al agua. Los 85 km de la bici fueron lo esperado, un ritmo suave, con problemas continuos con el cambio, y donde en las últimas subidas a Garabitas empezaba a notar la falta de fuerzas del cumulo de kilometros. La carrera a pie fue el remate de ese desfallecer de fuerzas, entre los kilómetro 7 al 15, prácticamente 1 vuelta y media, me dedique mas a andar que a correr rezando porque no me faltaran mas fuerzas, al final me entraron las fuerzas, el ego y la compañía para hacer los últimos 5 km con un poco de decencia. Al final termine con un muy mal tiempo en los 20km pero con la satisfación de haber conseguido en un fin de semana algo que durante muchos momentos pense que sería imposible.

La sobrecarga, sobre todo mental, y la bici herida me dejaron fuera de Buelna, las vacaciones además han retrasado la visita al médico de la bici, y las piezas me llegaron la semana pasada.
Voy a arreglarla con tiempo justo para ir a Pálmaces, pero la ilusión sigue, algo tocada como mi bici, pero hay está.

1 comentario:

Dani dijo...

Que odisea con el cambio. Yo tambien hice el del domingo, fue mi debut, y lo descubri gracias a tu blog, asi que muchas gracias